Platicando de viajes: Las Barrancas del Cobre, Parte I

Una muy buena manera de celebrar a nuestro país no sólo en éstas fiestas patrias, sino permanentemente, es conociéndolo, viva México, es vivir México, recorrerlo y sentirlo es una forma de  amarlo.

Uno de los recorridos que por diferentes situaciones, (y la principal…he de reconocerlo…, es por haberme dejado llevar por comentarios en los medios de comunicación respecto al ambiente que según ellos, se vive en los Estados de Chihuahua y Sinaloa) varias veces había pospuesto, es el de las Barrancas del Cobre, el cual puedes tomar saliendo de Los Mochis, Sinaloa, con rumbo a Chihuahua, o bien, al contrario, salir de Chihuahua y llegar a los Mochis.

 Me decidí por empezar el paseo en Chihuahua, así que ahí voy! …

Hay una variedad de ofertas para visitar las Barrancas del Cobre, precios e itinerarios distintos que se amoldarán a su tiempo y presupuesto, con el plan que mejor les convenga podrán hacer éste hermoso viaje el cual les recomiendo ampliamente, al final de ésta primera entrega, les pongo la liga del proveedor que yo elegí por si les es de utilidad, yo quedé muy satisfecha con su atención, muy amables y puntuales en sus servicios.

Chihuahua, la lindura del trato de los Chihuahuenses.

Nuestra aventura inició a las 6 de la mañana de un lunes saliendo de la Ciudad de México hacia la Ciudad de Chihuahua, Chihuahua, me sorprendió su amplitud, modernidad y limpieza, claro que por ser el Estado más grande del país, lo primero debería ser obvio, pero verlo es otra cosa, y más cuando en la capital estamos acostumbrados a vivir tipo sardina.

Las calles amplísimas, con un tránsito fluido, conductores con educación vial puesto que ofrecen el paso al peatón sin plantar cara, y limpio, todo limpio (esto fue lo primero que notamos), en el centro había botes de basura cada 100 metros o menos, ustedes dirán ah! es el centro histórico y por eso está así… pero no, porque el mercado, calles aledañas a él y la zona de hoteles, también estaban así!.  


Pero nada me dejó una marca tan profunda como el trato de los Chihuahuenses, gente amable, muy cálida, franca, afectuosa y amigable, dispuesta a ayudarte en lo que necesites, simpática y por demás relajada, hablo de toda la gente con la que tratamos, peatones a los que pedimos indicaciones o referencias, choferes de uber, personal de las tiendas, de los restaurantes, del hotel, de la agencia de viajes, vendedores de artesanías, en fin, toda, no hubo una sola que nos diera mal una dirección, que nos negara información o que nos dejara de ofrecer algo para hacer más fácil nuestra búsqueda, más cómoda nuestra estancia o mejorar nuestro consumo, con una actitud siempre atenta y la mejor sonrisa. 

Platicando con diferentes personas preguntamos (inevitablemente), sobre la violencia y casi estado de guerra de la que hablaban en los medios de comunicación, ellos tranquilamente contestaron, “¿Y ustedes qué ven?”,… ¿Nosotros? sólo vimos tranquilidad.















A la belleza enorme del Estado de Chihuahua sólo la opacó la lindura del trato de los Chihuahuenses, a quienes les mando mi reconocimiento y agradecimiento, nos hicieron sentir de y como en casa.  

Recorrido en Santa Eulalia, Chihuahua.

Un lugarcito muy agradable y pintoresco es Santa Eulalia, cuyo nombre completo es Santa Eulalia de Mérida de Chihuahua, es un pueblito minero a 10 kms de Chihuahua, lo visitamos para conocer una mina en la que se había trabajado durante 200 años, aunque ya se está en desuso, la estructura que a pura fuerza de hombre y bestia se explotó, se encuentra firme. Inmediatamente al entrar sientes el cambio de temperatura, el frío de la piedra refresca la cavidad, haciéndola muy agradable, al menos de día, de noche y en tiempo de frío imagino que debe estar a grados bajo cero como todo lugar extremoso. Ahí, labrados en la piedra por el clima y el tiempo, conocerás el rostro del guardián de la mina y la estatua del camaleón.

Al lado de ésta mina se encuentra otra en donde habitan una gran cantidad de murciélagos que de acuerdo a nuestros guías, contribuyen a la agricultura del Estado acabando con las plagas de las cosechas, lo que permite que frutas y verduras crezcan sin contratiempos. 

Por la noche, a las 19:00 horas en punto, los murciélagos salen de la cueva para volar hasta 200 kms. para alimentarse, lo que constituye un espectáculo natural increíble y que forma parte de los recorridos nocturnos de Santa Eulalia, sobre todo los fines de semana. En el día no está permitido el acceso a la mina de los murciélagos, por respeto al hábitat de estos animalitos y por seguridad de los visitantes.

Finalizamos nuestro paseo degustando una sabrosa paleta helada de zanahoria, yogur y nuez, muy rica y visitando un pequeño museo donde se exhiben los minerales que se extraen de las minas, el dueño tiene una colección preciosa de piedras que te dejará boquiabierto.
















En la segunda entrega, les seguiré platicando de ésta gran aventura que apenas empieza.

Que tengan unas felices fiestas patrias, y Vivan México! Viviendo México.

Nos leemos pronto en otra plática de té y café J   

Liga para el tour:

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Platicando de cine: Intensamente, de Disney-Pixar

Platicando de Hombres y Mujeres: ¿Felices mantenidas o dependientes controladas?

Platicando de libros: Por qué los hombres aman a las cabronas.